Taxco, Guerrero: Esta ciudad es famosa por su encanto colonial, por sus artesanías de plata y por estar rodeada de montañas.
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Huasca de Ocampo, Hidalgo: Pueblo famoso por su prismas basálticos que son columnas naturales de piedra formadas por el enfriamiento de lava.
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Cholula, Puebla: Una ciudad pequeña llena de tradiciones, reconocida por su gastronomía y la vista al imponente Popocatépetl.
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Valle de Bravo, Estado de México: Este pueblo mágico tiene un gran lago, rutas para hacer bici de montaña y los famosos parapentes.
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Cuetzalan, Puebla: En medio de La Sierra Madre Oriental se encuentra este pueblo para los amantes de la cultura indígena. Aquí se produce uno de los cafés más reconocidos del país.
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Tepoztlán, Morelos: Este puebo lleno de energía es apto para amantes del tarot y el yoga, pero también para deportistas que deseen subir el gran "Tepozteco" y apreciar la vista de todo el pueblo mágico desde las alturas.
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Bernal, Querétaro: Su principal atractivo es la gran piedra que guarda muchas leyendas. Hay lugares para acampar y también un mirador. Se puede seguir La ruta del vino, pues está muy cerca de ahí.