Cinco consejos para llevarte bien con tu ex

Cada vez es más común ver parejas que terminan su relación en buenos términos. Y es que a veces ser amigos o padres es más importante que sostener una relación de pareja. Ahí está el caso de Lucero y Mijares, dos famosos con una trayectoria impecable hasta en eso de ser exes.

Y si ellos pudieron, ¿por qué tú no?
Cada relación de pareja es un mundo y hay circunstancias que definen todos los procesos que se viven después de una separación. Siendo así, se entiende que una relación que fue violenta o tóxica tenga muy pocas probabilidades de terminar bien.

Sin embargo, cuando una relación termina sin violencias, se pueden esperar cosas buenas para todas las partes, incluyendo a la propia pareja, a los hijos, a la familia extendida y a los amigos en común.

Ante este panorama, van algunos tips para superar el pasado y vivir el presente… con tu ex.

Ya lo pasado, pasado, decía José José y justo ese es el primer consejo: dejar atrás todo lo que hayan pasado como pareja, pues empeñarse en revivir los errores sólo trae malos momentos y resentimientos innecesarios. Lo que sí es buena idea, según dicen los expertos David Villarreal y Luis Tapia Villanueva, es tener presente lo mejor del otro y saber que las personas cambian.

Darse tiempo y espacio es una de las reglas a seguir que mejor funcionan. Mantener la distancia y el respeto de los tiempos del otro no sólo es bueno para quienes viven el duelo de la separación, sino incluso para los más cercanos, que pueden ser los hijos u otros parentescos. Poner límites es un buen inicio para empezar a vivir con otras dinámicas en las que la confianza y el cariño se han transformado.

Crear alianzas es lo mejor que podrás hacer por ti, o por lo menos así lo apunta la evidencia psicoterapéutica, que afirma que las alianzas reducen los daños en las relaciones que terminan y promueven un clima emocional positivo donde hay una revaloración de las cualidades de la expareja. Respecto a los hijos, Tapia asegura que las alianzas benefician su autoestima, pues éstas ayudan a que los hijos naveguen mejor por la transición que implica que sus padres dejen de ser pareja.

Críticas innecesarias, aunque la crítica forma parte de la terapia de pareja antes de una separación, los comentarios negativos y desagradables sobre la expareja dejan de tener cualidades positivas cuando se dicen desde el resentimiento. Ver sólo lo malo en el otro o remarcar sus errores de manera exagerada frente a otros va en contra de cualquier buena relación por venir.

Discutir, ¿para qué? Igual que las críticas, pelear por cosas o circunstancias que tienen solución son un reflejo de que hay procesos sin cerrar o que simplemente no has podido superar la ruptura. Vale la pena dejar de lado la defensividad, el desprecio y la supuesta indiferencia.