Digno de historia de amor y drama de Shakespeare, el primer actor Don Éric del Castillo y su esposa Kate Trillo han dicho que en esta circunstancia de pandemia mundial, si a uno le da coronavirus, el otro lo besa para morir juntos. Así lo reveló su hija Verónica del Castillo durante una entrevista a una revista de espectáculos.
Como Romeo y Julieta, los papás de Kate del Castillo se quieren ir juntos
Éric del Castillo y su esposa Kate hicieron un pacto de amor en el que acordaron que si uno se muere, el otro lo sigue
Los padres de Kate y Verónica han estado juntos por más de 50 años y han sido por mucho una de las parejas más sólidas del espectáculo. Verónica reveló a la revista que las pláticas sobre la muerte se han vuelto más recurrentes, pues ambos reconocen sus edades, 86 años él y 78 años ella.
Y retos han pasado muchos, siendo uno de los más grandes el cáncer de próstata que don Éric padeció y venció en 2012.
Sobre la pandemia y las posibilidades de morir, Verónica dijo que “a ellos, como a todos, esta pandemia les ha pegado emocionalmente; les cuesta trabajo aceptar que algo así esté pasando, les parece una historia de ciencia ficción”, pero que ella intenta estar al pendiente y calmarlos con terapias de reiki.
Sobre cómo ha llevado que sus padres hablen del proceso de morir, Verónica fue muy clara y reconoce que le cuesta aceptar que eso pasará, “a mí lo que no me gusta es que hablen en plural, como si se fueran a ir juntos. Lo normal es que se vaya uno y luego otro, pero traen una alianza, como que se quieren morir juntos”, dijo.
El hecho es que de broma en broma, doña Kate ha manifestado que si a don Éric le toca morir por coronavirus, ella se contagiará de inmediato para morir con él: “Si a tu papá le da coronavirus, yo lo beso para morirme con él”.
Verónica contó que aunque no se siente cómoda con la decisión de “morir por amor”, entiende que estas cosas no se pueden evitar pues son decisiones que corresponden sólo a ellos dos. Aunque igual espera que no suceda, y por lo pronto sigue cuidando de ambos, quienes por lo pronto, se encuentran bien de salud.
Al término de la entrevista, la hija mayor de los del Castillo confesó que aunque a sus padres no les falta nada, no hay un testamento con gran contenido pues la casa donde viven es un regalo que les hizo Kate, y de sus joyas y otras pertenencias de valor, no les queda nada porque les han robado en varias ocasiones.