null: nullpx

Estas son las razones por las que Isabel II dejó de querer a Lady Di

Aunque mucho de su relación es un misterio, se sabe que la Reina terminó no tolerando a Diana por considerarla inestable
Publicado 13 Ene 2022 – 12:33 PM ESTActualizado 13 Ene 2022 – 12:33 PM EST
Comparte
Default image alt

Diana Spencer fue desde el inicio la promesa perfecta de la princesa ideal para Carlos. La frescura de su imagen y todas las cualidades con las que fue criada, además de sus habilidades con los deportes que practicaba la familia real, la convirtieron de inmediato en la favorita para acompañar al heredero del trono británico.

Pero al paso del tiempo, parece que la elección no resultó como esperaban y todo comenzó a ir de mal en peor, al punto en que la Reina Isabel, quien durante el noviazgo y los primeros años de matrimonio de Lady Di con el Príncipe Carlos le mostró su apoyo incondicional para sacar adelante su matrimonio, decidió ignorarla y demostrarle que ya no era bienvenida en su territorio maternal.

Según Tina Brown, quien escribió la biografía de Diana en 2007, la reina encontró en Diana una chica encantadora y apropiada para el palacio, pero poco a poco Diana hizo todo lo posible por no seguir las reglas y volver su relación con Isabel II cada día más difícil.

Aunque la historia de lo que vivieron la Reina y Diana sigue siendo un misterio, lo que se ha retratado a lo largo de series, libros y películas es revelador y da pistas de por qué la monarca dejó no sólo de apoyarla sino hasta de quererla.


Otra estudiosa de la corona británica, Ingrid Seward, escribió que las tensiones entre ambas surgieron cuando el matrimonio tuvo sus primeros problemas y Diana dio de qué hablar a los periódicos. La relación se volvió insostenible cuando Diana sufrió sus peores momentos con la bulimia, cosa que la Reina vio como una causa de los problemas, no como efecto.

A partir de entonces todo se descompuso y entre las visitas no programadas de Diana que le exigían atención extra a Isabel II, la bulimia, el trato indiscreto con los trabajadores del palacio y su afán por ser el centro de atención de los medios, terminó por reventar la relación nuera-suegra.

Al final de sus días, según The Washington Post, la Reina renunció a lidiar con Diana pues según sus estándares, la princesa había defraudado a la monarquía contando sus intimidades (incluyendo la controversial entrevista con Martin Bashir) y dejando ver que gran matriarca no tenía control de la vida de sus súbditos cercanos, como por mucho tiempo se hizo creer.


Comparte