En Japón, las mujeres ya están cansadas de tener que usar tacones de manera obligatoria en la oficina y por ello, han comenzado una campaña llamada #KuToo.
Mujeres protestan en Japón para que el uso de tacones en la oficina no sea obligatorio
A través del movimiento #KuToo, se busca lograr que los tacones ya no sean mandatarios para las mujeres en las oficinas

De acuerdo a Reuters, el nombre surge como un juego de palabras que se deriva de las palabras “kutsu”, que significa zapatos y “kutsuu”, que es dolor en japonés.
La actriz y escritora Yumi Ishikawa fue quien comenzó con la petición en el sitio Change.org, que hasta el momento lleva más de 25 mil firmas recaudadas y ya fue entregada al ministerio de salud para su consideración.
En ella, explica que el uso este calzado es algo a lo que se ha tenido se enfrentar en su carrera, y que se ha vuelto costumbre entre las mujeres el tener cambiarse por tenis o flats al concluir la jornada laboral.
“Es difícil moverse, no puedes correr, y tus pies te duelen. Todo por conservar los modales”, escribió.

Una propuesta similar fue realizada por la recepcionista británica Nicola Thorp, quien fue obligada a regresar a su casa al llegar con flats al trabajo en el 2016, pero no se hicieron modificaciones a la ley en ese momento.
Según Eleana Terán, directora de desarrollo de la asociación Cordem, los tacones comenzaron a utilizarse por miembros de la clase social alta, y en la actualidad, su uso sigue siendo una manera de mostrar la capacidad económica.
“Se estima que las mujeres, cuando llegamos a puestos en lo que ganamos lo mismo que un hombre, gastamos un tercio de sueldo más que el hombre en ‘lucir’ como directiva, entonces, ahí empiezan a salir otras desigualdades”, explicó.
“Yo creo que iniciativas así son muy importantes porque hay lugares que, aunque parezca ridículo, te siguen obligando a tener ciertos estándares de vestimenta, y entonces empieza otro problema muy grande, en cómo vivimos nuestras feminidades y cómo interpretamos nuestra identidad”, recalcó.
En México, aún existen varios lugares en los que el uso de tacones es un requisito, por lo que es esencial que la moda se ajuste al estilo de vida de las mujeres contemporáneas, y no al revés.
“Las mujeres han aumentado su actividad económica en las últimas dos décadas muchísimo más que en el siglo pasado, son muchas más las mujeres que trabajan, son más las mujeres directivas”, dijo.
“El contexto ya cambió, ya no somos ni las mujeres de los 50 que estábamos en nuestra casa limpiando, tampoco somos las secretarias de los 80 que nuestra única función es servirle al hombre, la gran mayoría, lo hacemos porque tenemos que trabajar sí o sí”, concluyó la máster en Sociología y Cambio Global.