Recientemente, la Reina Isabel se vio obligada a cancelar su ida a la celebración de la tradicional bienvenida en el castillo de Balmoral, donde da comienzo a sus vacaciones de verano. Según las fuentes allegadas a la monarca de 96 años, este ha sido un año complicado para la reina, pues los problemas de movilidad se van haciendo cada vez más presentes.
Reina Isabel II: vuelve a preocupar su estado de salud
La monarca canceló su asistencia a la tradicional bienvenida a Balmoral.

Tal es el caso que ahora, por una dolencia tuvo que cancelar varios compromisos previstos a lo largo de este año, en que celebra sus 70 años en el trono. Y como es de esperarse, estas ausencias han levantado profundas preocupaciones por su estado de salud en general, más cuando en algunas de sus últimas apariciones se le ha visto apoyarse en un bastón.
Ahora, cuando no se había cumplido ni el mes de su escandalosa ausencia en Westminster, se volvió a anunciar que la soberana no estaría presente en otros actos porque se había resentido físicamente. Esto mismo la llevó a abandonar el pasado 21 de julio el Castillo de Windsor para instalarse en Craigowan Lodge, el histórico refugio escocés que la familia real tiene en el interior de la finca de Balmoral, donde Isabel II pasa largas temporadas.
Con esto sobre la mesa, se ha informado que la misma Reina está consciente de su estado de salud y está procurando cuidarse lo más posible y disfrutar más de sus días de descanso y paseo por las enormes hectáreas de áreas verdes en Balmoral, además de que, según el periódico británico The Sun, mandó a poner un ascensor apto para silla de ruedas en esta residencia con la plena intención de que ella no haga el mínimo esfuerzo si no es necesario.
Pero a pesar de los achaques, parece que todo se debe a una mera factura de la edad y a los cuidados extremos para que Isabel II dure mucho más tiempo sana y lúcida. Así que por lo pronto no hay mucho de qué preocuparse pues ya está en proceso de descanso para seguir con los próximos compromisos, como nombrar al sucesor del Primer Ministro de Reino Unido, Boris Johnson, quien dimitió a su cargo hace más de un mes.