Tips de meditación para principiantes
Mucho se ha hablado sobre cómo ayuda la meditación para sentirse más tranquilo, para reducir el estrés e incluso incrementar tu felicidad, pero para llegar a eso hay que saber cómo hacerlo, empezando por cómo respirar.
Para comenzar debes saber que para hacer esta práctica se necesita dedicación, ya que puede ser un proceso de aprendizaje largo.
Hay que recordar que en la meditación no se trata de dejar a un lado tus pensamientos, sino más bien es enfocarse en el momento presente, incluyendo lo que pasa por nuestra mente, emociones y sensaciones.
Así que aquí te decimos lo básico para empezar tu meditación:
- Reserva un tiempo formal para practicar la meditación, para que así más adelante se vuelva una rutina para ti. No importa si le dedicas 10 minutos, lo que sea es valioso.
- Encuentra un lugar en el que te sientas cómodo y más tranquilo para poder meditar.
- Relaja tu cuerpo y concéntrate en tu respiración. No pienses en nada más que en cómo entra y sale el aire de tus pulmones.
- En repetidas ocasiones tus pensamientos harán que te distraigas, cuando esto suceda, simplemente observa en qué pensabas o qué te estaba distrayendo, haz una pausa, tómate un momento y regresa.
- Lo importante es cómo respondemos cuando sucede. Simplemente reconoce lo que sea que estaba pensando, sin atribuirle demasiado juicio, y tómese un momento para volver al presente y reanudar la meditación.
Al principio, puede parecer que no siente nada en absoluto. Pero a medida que avanzas, es posible que comiences a notar todo un mundo de nuevas sensaciones. Algunas de estas pueden ser agradables, otros pueden ser neutrales y sentirse como un hormigueo o picazón. Mientras que otros pueden desagradables, que hagan sentir un dolor en los pies en alguna otra parte del cuerpo.
No importa cuál sea esta sensación, lo importante es que la reconozcas, que la aceptes, sin etiquetar si fue una experiencia buena o mala.
Mucha gente suele combinar la meditación con yoga y pilates, siendo esto más beneficioso para reducir problemas de estrés y ansiedad, y por supuesto, mejorar la salud física.