Ana de la Reguera dice que entre más congelados están sus óvulos, menos ganas tiene de ser mamá

Como se pudo ver en su serie biográfica de Amazon, Ana de la Reguera congeló sus óvulos por si en algún momento se decidía a ser madre. Ante la pregunta insistente de cómo va este proceso y las ganas de tener bebés, ella respondió a algunos medios en el aeropuerto que quizá se anime el próximo año.

Sobre el procedimiento de tener congelada su genética, Ana contó que tiene como seis años que contrató los servicios de una clínica en Nueva York: “Sí los congelé hace muchos años, hace como 6 años, ahí están, pago renta cada año, fue muy chistoso porque por la presión social lo hice y apenas lo hice, me sucedió lo opuesto, menos ganas me dieron de tener hijos”.

Eso sí, dijo que por ahora no tiene prisa en usarlos, y que congelarlos logró un efecto contrario en ella, pues ahora menos piensa en la presión de la maternidad: “ me pasó lo contrario, ahora menos se me antoja, porque creo que ahí están y no tengo ninguna prisa, yo creo que vivirán ahí contentos (...) se harán amigos de otros, ojalá y se enamoren, se lleven bien, no sé”.

Con el humor que caracteriza a la jarocha, dejó muy claro que sí le gustan los bebés pero no le llama la idea de embarazarse: “tengo un instinto maternal, no sé, me encantan los niños, me fascinan, se me hacen lo máximo, pero todo el hecho de estar embarazada y un bebito, la neta no se me antoja mucho”.

Ana no dejó pasar la oportunidad de soltar un dato interesante sobre su proceso con los óvulos y reveló que cuando los congeló no sólo lo hizo por ella sino que también están disponibles para que alguien más, sobre todo una de sus amigas, los use en caso de que ella no quiera o muera.