Por años, Luis Miguel ha pretendido mantener su vida privada como tal y poco se deja ver con sus múltiples parejas. Sin embargo, en los últimos meses ha estado envuelto en un lío de amores, pues varias mujeres han declarado haber estado con el cantante al mismo tiempo, lo que ha hecho que hasta se manden indirectas en redes sociales.
Luis Miguel y Paloma Cuevas se dejan ver muy enamorados por España
La pareja fue captada tomada del brazo en un conocido centro comercial de Madrid.

Pero a pesar de los dimes y diretes, parece que para el cantante por ahora sólo existe una realidad, y esa es que mantiene una relación sentimental que va en serio con la diseñadora española Paloma Cuevas, su comadre, con quien habría formalizado después de que ella anunció su divorcio del torero (y buen amigo de Luis Miguel), Enrique Ponce.
Esta relación había estado velada por los misterios propios de la vida del cantante, pero como se ha confirmado en últimas fechas, ya no le importa mucho y recientemente varios medios los han captado paseando muy acaramelados por centros comerciales de Madrid, España, donde residen actualmente.
Aunque por el momento ni Luis Miguel ni Paloma han confirmado su relación, ya han surgido muchas teorías en torno a su romance que, según dicen, ya tomó tintes de un noviazgo en serio.
O por lo menos eso es lo que reportó recientemente el programa Despierta América, que presentó algunas imágenes de Luis Miguel y Paloma durante una cita, paseando por otro centro comercial, tomados del brazo y sonriendo juntos mientras se hacen cariños al subir las escaleras eléctricas del sitio.
En el breve clip compartido por el programa, se les ve de espaldas y cómo Paloma se da cuenta de que los están grabando y siguiendo. Esta visita habría sido distinta de la que se reportó a finales del año pasado, cuando se dijo que él habría mandado a cerrar algunas tiendas para visitarlas de manera exclusiva y sin el acoso de los paparazzi, pero ahora habrían ido como una pareja cualquiera.
Finalmente, algunos medios locales reportaron que así como en otras ocasiones, antes de poder ir por los pasillos del centro comercial, la pareja habría estado por un largo tiempo dentro de una cafetería hasta que pudieran ir más tranquilos a hacer sus compras hasta la 1 de la mañana, cuando abandonaron el lugar.