Meghan Markle: así es la complicada relación que tiene con su familia
Desde que Meghan Markle saltó al ojo público por su relación con el príncipe Harry, una de las cosas que más ha llamado la atención es cómo se lleva con su familia, en especial su papá. Y es que desde el anuncio de su boda, su padre, Thomas Markle, fue un gran obstáculo para que ella pudiera adaptarse a las reglas de la monarquía británica.
La relación con sus medios hermanos, Thomas Markle Jr. y Samantha Markle, lo confirman pues ambos la han criticado fuertemente en cada oportunidad que han tenido. El más reciente golpe lo dio su hermano, quien la llamó “presuntuosa superficial” y hasta le pidió a Harry que cancelara la boda.
Su media hermana, Samantha, tampoco ha sido benevolente y a pesar de que vio a Meghan por última vez en 2008, escribió un libro sobre ella para “develar” sus más íntimos secretos. En el libro The Diary of Princess Pushy's Sister Part 1, escribió que Meghan no ayuda a su papá: “Lo que ella puede gastar en un fin de semana ayudaría mucho a papá, así que eso debería ser una prioridad para ella. Si nuestro padre muere, ¡es tu culpa Meg!”.
Además la llamó mentirosa compulsiva y adelantó que ella cree que traicionará a Harry y engañará a toda la familia real para sacar provecho.
Respecto a su papá, él ha aprovechado para hacer públicas las diferencias con Meghan a través de cartas y comunicados que ha hecho a la prensa. Incluso antes de la boda vendió algunas fotos de él leyendo un libro de la realeza, cosa que empeoró la relación y provocó definitivamente que no fuera invitado a la boda de los duques.
La relación de Meghan con su padre está rota desde mucho antes de que ella se involucrara con el príncipe, por lo que ha sido muy difícil tratar de componerla y lograr algo. Así que se espera que por muchos años existan declaraciones negativas de ambos lados. La más reciente de Thomas es que culpa a Meghan de que Harry ataque a su abuela, la reina Isabel II, quien ya tiene 95 años.
"Es vergonzoso para ellos decirme hace unos años que 'no hable nunca con la prensa', pero que luego se pasen tres horas en un programa con Oprah, donde Harry afirma que se está recuperando de su enfermedad mental y curándose a sí mismo. Es una broma".